Prisionera!!!

Otro capitulo mas Tratare de subir el proximo mas rapido jajaja disfrutenlos se les quiere!

capitulo 11: Beso correspondido

De verdad estaba siendo brusco conmigo, me dolía el brazo de lo fuerte que me agarraba. Aparte de ser un desgraciado también era un animal “menos mal que lo aceptas”; no sabía qué le ocurría internamente, pero se notaba bastante molesto, lo cual me confundía. Era absurdo pensar que estaba celoso, hace algunos días había descubierto que todo era mentira; sin embargo sus ojos estaban penetrantes; nunca se había comportado conmigo como ahora, frunciendo su entrecejo, y respirando medianamente rápido; segura y abatida, no comprendía lo que sentía.

-¿Qué te sucede? – Dije adolorida- nunca te has comportado así

-eso es lo que te digo a ti, ayer te llamé en la tarde y en la noche, no contestaste, esta mañana te llamo y no contestas. Creo, no más bien necesito una explicación tuya en vez de decir qué me sucede- habló de una forma enérgicamente sarcástica y pedante “pobre idiota…. Ay no… por favor no me digas que te gusta que te cele… ¿no ves como se puso?” Esto era verdad, si estaba contenta, pero a la vez tenía miedo. Como pude, desprendí mi brazo con toda fuerza, ¿Por qué le temía? “para nada tu no le temes, tu estas confundida, sorprendida, a parte estas ilógicamente estás loca por él. Además, recuerda, debes encontrar un forma de vengarte, y esto debe ser de tu provecho, esto nos ratifica, que le gustas; debo aceptarlo, aunque lo aborrezco , me conforta esta idea” esto era cierto, debía aprovechar cada segundo para cobrarme todo lo que él me había hecho. No sé cómo ni cuándo pero tome mi celular disimuladamente y empecé a grabar el sonido de nuestra conversación

- disculpa, pero no soy de tu posesión, no te permito que me controles, ni que me lastimes, óyeme bien , mas nunca me hagas esto… el día que me vuelvas a lastimar, se acaba todo esto- ok me arrepentí de decirlo, no sabía si el me quería al nivel de soportar lo que le había expresado, pero no di mi brazo a torcer, debía probarlo, grabar esto serviría para estudiarlo. lástima que no podía grabar sus expresiones, así que debía estudiarlas lo mas minuciosamente posible.

-disculpame, por favor discúlpame, últimamente no sé que me sucede, estoy…- miró al cielo, como si esperara una señal, una respuesta, pero ¿de qué?, se veía arrepentido, aunque todavía seguía ansioso- no se … no sé, de verdad disculpa, parezco estúpido lo sé, todo esto se me acumuló; me molesta ver cómo te habla y te mira ese chico- bajo su mirada a mi rostro; de una manera angelical y suplicante me acarició la mejilla- de verdad no sé que me sucede, por favor discúlpame, es que… de verdad no me gusta cuando te miran los chicos de la escuela, pareciera que te quisieran comer,; oigo sus comentarios sobre ti, sobre tu cuerpo, sobre tu cambio, sobre lo que piensan de ti, y me dan ganas de destrozarles la cara… no los aguanto- hizo gesto de repulsión, estaba trastornado, yo todavía seguía atónita, derretida “ deja de ser estúpida ¿sí?”

-por favor no lo vuelvas a hacer, no me gusta que suceda esto, no quiero pelear contigo- ya había recordado todo, volví a mi plan, decir eso era un arma de doble filo, en realidad no quería pelear con él, pretendía vengarme, mas sin embargo, me encantaba su actitud, aunque debo aceptarlo, era muy posesiva ¿haría estas escenas a Jessica alguna vez? Al principio me dio miedo pero ¿Por qué tenerle miedo a esta cucaracha?, para nada, pero seguía sin entender sus acciones, era evidente, estaba empezando a confundirse. Él me abrazó fuertemente, y estaba vez ,ya no sostuve más mi celular, lo tiré en el bolsillo de mi mochila.

- cada… cada vez empiezo a necesitarte mas, estos dos días has estado muy rara, me tienes desconcertado con tus actos, pero ya nada me importa, de verdad empiezo a requerirte mas y mas.. y ahora que te tengo tan cerca , te siento lejos, muy distante- era raro oírlo hablar así, lo sentía tenso y a la vez vencido, estaba acostumbrada a escucharlo decir frases copiadas de novelas y películas cursis, pero esto sonaba como si fuera de lo más profundo, estaba complacida , aunque internamente me debatía entre apuñalarlo con un gusto enorme o besarlo sin parar “¿eres imbécil? Él te mintió, el siempre va a preferirla a ella, aunque sienta cosas por ti” me dolía aceptarlo, esto me llenaba de irritación. No me soporté, empecé a sentirme incomoda, su abrazo me perturbaba y no debía dejar que esto sucediera. Sin más ni más, no resistí lo empujé con resentimiento, él se notaba aun mas perturbado, detallé su rostro por dos segundos, debatiéndome entre alejarme o besarlo; sin pensar en mas nada seguí mi deseo y por instinto lo bese, angelical y pasional, tímida y osada, todo en una sola acción, anhelaba tenerlo cerca de mí; lo empujé hacia mí con todas mis fuerzas, su cuerpo estaba sumamente pegado al mío, sin embargo quería más de él; nuestras reparaciones eran extremadamente veloces, y nuestros labios hiperactivos “¿Qué haces?¡ Como te encanta herirte!” si , me encantaba herirme , mas en este momento solo codiciaba tenerlo conmigo, disfrutar de un verdadero beso, de uno con sentimientos análogos, de un besó en que él verdad experimentara lo que yo había sentido hace algún tiempo, un beso que ciertamente era correspondido con todas las fuerzas.

Ya era suficiente, pero, no podía dejar de besarlo, de sentir sus manos en mi espalda, aferradas enérgicamente, sus labios y su lengua esclavos de mí, por primera vez complacidos por besarme, de sentir la adrenalina a flor de piel; era una estupidez y ya era hora de hacer lo mismo que él hacía. Me aleje suavemente, él quería mas, sus ojos entrecerrados, buscaban mi boca, era tan gratificante verlo hacer esto, alejarme lentamente para luego acercarme, rozar mis labios con los suyos, sin besarlo como él aspiraba, sin dejarlo complacido, ese era el punto, dejarlo con ganas de mí.

-debo irme- le susurré a milímetros de su boca, todavía aferrada a él

-no lo hagas- suplicó Mike

-debo hacerlo- satisfecha y perturbada deje de abrazarlo y me despojé de él, caminado de forma incorrecta, observándolo inexpresiva- de verdad debo hacerlo- ya mi miraba era dura.

Cuando no lo tuve a mi vista, recordé lo sucedido el día anterior, la idea volvió a mi mente, debía estudiarla lo más preciso posible, primero debía verla, analizarla y prepararla, me correspondía saber cómo y con quien elaborarla. Corrí a mi clase, nadie se veía por los pasillos de la escuela, seguramente ya había sonado el timbre, ciertamente interrumpiría, mas no me importaba, ya estaba muy atrasada con los apuntes. Entre y allí estaban otra vez mirándome de arriba abajo , no preste atención a la muchedumbre, solo me fije en ella, la farsante más arrogante de toda la tierra junta, observándome extrañada y aparentemente ansiosa.

-hola ¿Dónde estabas?- susurró en el momento en el que me senté justo a su lado, como era de esperarse de una entrometida como ella

-en el bosque con Mike- murmure con tono orgulloso; voltee a ver su cara, evidentemente estaba tensa y trataba de disimularlo pero no podía; tenía muchas ganas de reírme, era tan evidente que quería carcajearme en su cara

-¿de qué hablaron?- estaba ansiosa

-discutimos- era incuestionable su alivio, aunque deseaba fastidiarla, hacerla sentir mal- tuvo una escena de celos conmigo…, se puso muy brusco , nunca se había comportado tan posesivo - se colocó rígida al oír mis palabras, de pronto me acordé de la grabación, debía hacer una maniobra, quería ver su cara y sabía cómo hacerlo.

De forma muy cotidiana tomé el celular, actué lo más habitual posible deslicé la pantalla e hice un expresión de confusión

-¿Qué extraño?- “jajaja deberías nominarte al Oscar jajajaja”

-¿Qué sucede?- ella estaba extrañada

-hay una grabación en el celular- coloqué el celular en mi oído disfrace un rostro de incomodidad perfectamente, de verdad , yo era astuta- ammmm- mi rostro expresaba cansancio- el celular grabó la discusión, seguramente estaba desbloqueado y se presiono la tecla de grabación- ella miró al celular fijamente por unos segundos, yo supe que hacer

-pero ¿cómo fue, que se dijeron?- sonaba todavía más afanosa

-no quiero hablar de eso- yo parecía desilusionada, adoraba ver su desesperación, su aptitud ansiosa, me encantaba verla reprimiéndose, amaba humillarla silenciosamente, verla sufrir y combatirse internamente, al igual que lo hacía yo cuando no tenía ni idea de su plan, era un magnífico espectáculo que me gratificaba, me alegraba aplastarla lentamente, verla someterse poco a poco

-por lo menos déjame oír la grabación – y así fue como el pez mordió por segunda vez el mismo anzuelo.

Continuara….
Dejen sus comentarios saludos...