La banda sonora de 'Crepúsculo' sale a la venta en una edición "deluxe" como aperitivo previo al lanzamiento de la película que plasmó en cine la saga literaria.
Stephanie Meyer, prolífica autora de la saga vampírica Crepúsculo , se reconoce una gran enamorada de la música. Incluso uno de sus libros está dedicado a la banda británica Muse. Lo que significa que, de alguna manera, el fenómeno literario se ha visto marcado desde su creación por una suerte de cultura o ambiente musical definido, que ha cristalizado en una banda sonora de reciente lanzamiento presentada en una edición "deluxe" acompañada por un DVD.
De manera inteligente, la compiladora de las canciones finalmente incluidas en la película logró acceder a cada uno de los recovecos de las escenas y "pegar" allí temas de sonidos y letras descriptivos, destinados a crear una atmósfera y reforzar estados anímicos de los personajes hechos celuloide.
La adrenalina del enamoramiento correspondido, la tristeza y soledad adolescente, la pesadumbre nubosa de un pueblo eternamente lluvioso, el sonido gótico inevitable en cualquier asunto que incluya colmillos y la sonoridad pop de un instituto norteamericano se agolpan, ordenadamente, a lo largo de los 17 cortes del disco. Escuchándolo, resulta sencillo regresar a las escenas de la película y experimentar las mismas sensaciones, lo que supone ya todo un éxito en la creación de la banda sonora.
La implicación con la imagen es tal, que, hasta el propio protagonista, el inglés Robert Pattinson -quien da vida al atormentado vampiro Edward-, firma una canción de sonido arrastrado y melancólico, "Never think", casi el aullido de un animal herido, conducida en soledad con las cuerdas de una guitarra. El actor es, de hecho, un virtuoso del piano, y casi quizá lo único que se echa en falta en el disco es la pieza de Debussy favorita de un decimonónico Edward incapaz de esconder su verdadera fecha de nacimiento bajo los vaqueros y las gafas Ray-Ban.
Bandas americanas, británicas y escandinavas componen los 17 temas de la música del filme, algunas de ellas casi por deseo expreso de Meyer, quien se reconoce fan, además de Muse, de Collective Soul. Pesos pesados como Muse, que firma "Supermassive Black Hole", o Linkin Park con su "Leave Out All the Rest" alternan con los sonidos nuevos de Paramore o Mutemath, grupos que compusieron específicamente para Crepúsculo canciones que finalmente se repartieron el protagonismo en escenas clave. Si "Decode" de Paramore terminó siendo el tema principal de la película, "Spotlight" de Mutemath dio fuerza a la atractiva secuencia del partido de béisbol de unos divertidos chupasangres.
Los verdaderos seguidores de la saga hecha cine disfrutarán, además, con los extras incluidos en el DVD que acompaña a esta edición musical, y que incluye una entrevista con Alex Patsavas, la supervisora musical de Crepúsculo ; y otra con la joven cantante de Paramore Hayley Williams. Además, los 30 minutos de vídeo no olvidan mostrar el videoclip de "Decode" y su proceso de grabación en el bosque que inspira el despertar amoroso entre Edward y Bella, así como el vídeo musical del tema "Full Moon", compuesto por The Black Ghosts, y un directo de Iron and Wine con su "Flightless bird, American Mouth".
Extraído de EstrellaDigital
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